Los sutras de Patanjali
La compilación de los aforismos o sutras donde primero se describe el Yoga como disciplina sucede hace más de 2000 años: Los Sutras de Patanjali. Se divide en 4 capítulos: Samadhi Pada (o la práctica de los seres evolucionados), Sadhana Pada (bhairanga sadhana o búsqueda exterior), Vibhuti Pada (Antaranga sadhana o búsqueda interior a través de la integración de la contemplación y la meditación y su total absorción o samadhi), Kaivalya Pada (el camino de la renuncia). Se trata de una doctrina renunciante y que parte de una visión dualista del mundo. Está fundamentada en la filosofía Samkhya, una de las escuelas o corrientes filosóficas más importantes dentro del hinduísmo. Reconoce la dualidad materia (prakrti) - espíritu (purusa), a diferencia de otras tradiciones no duales. Los 195 sutras o aforismos están concebidos como cuentas de un mismo hilo (sutura en español, sutra en sánscrito significa hilo, que podría asemejarse a sutura en nuestro idioma), tienen un sentido lógico y lineal.
En el Yoga de Patanjali se recogen 8 estadios por los que pasa el practicante de Yoga para alcanzar la unión con la suprema conciencia o espíritu divino (estado denominado Samadhi). El practicante deberá ir cultivando los 8 estadios que ayudarán a purificar su cuerpo, su mente y su alma, alcanzando un estado de absorción integral de presencia constante.
Se considera el texto clásico de referencia en la senda del Yoga clásico. Los ocho limbos se dividen en dos grandes bloques: Bhairanga Yoga o práctica de la búsqueda exterior o indirecta (Yama, Niyama, Asana, Pranayama, Pratyahara) y Antaranga Yoga o búsqueda interior directa (Pratyahara, Dharana, Dhyana, Samadhi). Pratyahara estaría en los dos bloques. Veamos cada uno de los 8 limbos:
1. Yama (Actitudes). Los principios del yama: ahimsa, satya, brahmacharya, asteya y aparigraha, asociadas a las técnicas y prácticas del Yoga, fomentando el respeto a uno mismo y a los demás.
Ahimsa: principio de la no violencia, ni con nuestro cuerpo ni con los demás.
Satya: principio de honestidad, sinceridad con uno mismo y con los demás.
Asteya: no robar, extendido a no aparentar cosas que no somos, no pretender ser lo que no soy.
Brahamacharya: no dejarse llevar por los instintos y las pasiones, no malgastar energía en cosas que están fuera de tu propósito.
2. Niyama (Observación de uno mismo). Los principios del niyama: saucha, santosha, tapas, swadhyaya, ishwara, pranidhana.
(Se trata de una serie de principios que nos ayudan a crear hábitos positivos, tanto de nuestras maneras de proceder como de nuestros pensamientos, para facilitar un entorno cómodo y favorable para el desarrollo del ser.
Saucha: limpieza y pureza de los sentidos.
Santosha: fomentar el estar contento y alegre.
Tapas: esfuerzo y ganas en todas las cosas que hacemos.
Swadhyaya: lectura, auto-estudio, cultivando la autoconciencia y la auto-comprensión.
Ishwara Pranidhana: práctica de la devoción y agradecimiento hacia el poder supremo o la madre tierra, consciencia universal o como el lector identifique el espíritu divino o suprema divinidad.
3. Asana (postura).
En los Yogas sutras de Patanjali queda definida la esencia del significado de Asana en el siguiente aforismo: STHIRA SUKHAM ASANAM –o literalmente, firme y cómoda postura–. El secreto de las secuencias de Asana según la descripción de Patanjali, debiera ser el alcanzar una postura estable buscando equilibrio entre la comodidad y el esfuerzo mínimo.
La práctica de asana tienen como
objetivo principal alcanzar el sentido de bienestar en uno mismo a
través de la plena consciencia y presencia durante la práctica.
Movimientos estables y sin fatiga, el esfuerzo debe ser mínimo y sin
forzar los límites del cuerpo. Cultivar la no violencia hacia el
propio cuerpo es escuchar los límites del propio cuerpo físico nos
acercará a una perspectiva amplia sobre cómo nos desenvolvemos con
los límites mentales y sobre qué tendencias definen nuestros actos
tanto en la práctica como en la vida.
4. Pranayama (Comprensión de la respiración).
Es la llamada ciencia de la
respiración. El prana es el flujo vital, del que cualquier
ser vivo está provisto, y sin el cual se terminaría la vida.
Literalmente significa extensión de la respiración. Se trabaja
llevando la consciencia plena a la respiración, que actúa como
ancla para la presencia constante durante la práctica de Asana.
Hay muchas técnicas para
trabajar la observación y la regulación de la respiración, cada
una con su consecuente aporte y beneficios para el desarrollo de la
plenitud del ser. Integrar la respiración como parte de tu práctica
te permitirá un estado de mayor presencia y observación de uno
mismo. Comentaremos más adelante las técnicas específicas para
trabajar la respiración.
5. Pratyahara (Observar la información de los sentidos).
Se trata literalmente de la
observación de la información que proviene de nuestros cinco
sentidos (Indriyas que llevan información a los manas -o
mente sensorial- y de la posterior retirada de dicha
información, trascenderla, dejarla a un lado para poder
concentrarnos en nuestro verdadero estado interior. La mente y la
conciencia deben ser capaces de dejar a un lado toda la distracción
externa que venga de los sentidos.
6. Dharana (Concentración).
Desha
bandha chittasya dharana: sostener
la mente en un punto concreto y mantenerla, eso es dharana. Es el
poder de concentración. El objeto sobre el que se deposita la
concentración puede ser algo material, pero también un concepto o
una idea abstracta sobre la que fijar la atención de forma
prolongada.
7. Dhyana (Meditación).
Tatra Pratyaya eka-tanata
Dhyanam: en el estado de
meditación el "objeto" es retenido constantemente en un flujo
ininterrumpido de consciencia hacia el objeto sin distracciones de
ningún tipo.
8. Samadhi (Estado de iluminación)
El observador se fusiona con lo observado, deja de haber una consciencia de uno mismo, aparece la liberación total de las fluctuaciones de la mente. Existen dos tipos de Samadhi: Savikalpa Samadhi, que aparece en forma de visión, de experiencia y se marcha inesperadamente, no se tiene el control sobre ella y puede aparecer en cualquier momento. Tras años de meditación podría aparecer el segundo tipo: nirvikalpa samadhi, en el que la entrada y la salida de esta experiencia se presenta como algo voluntario y a lo que se accede sin apenas esfuerzo.

